Ola,
no se que hacer, estoy enamorada de un chico de mi clase,
desde siempre pero me di cuenta ahora. El se mete muchas veces conmigo y hai
dias que incluso discutimos, pero, en cambio, muchos otros nos llevamos bien, e
incluso, lo he pillado alguna que otra vez mirandome fijamente. No se si le
gusto o si me desprevia, si le caigo bien o mal. Necesito desesperadamente
ayuda. Por cierto tengo su misma edad (14 años).
Hola
Que tengas un buen año… que te traiga respuestas y una mejor
relación con el amor en esta etapa de tu vida.
Bueno, muestras en principio bastante inseguridad, pero de
aquella que te hace pensar que a alguien le caes bien o te desprecia. Esta
incertidumbre es un poco extrema, vale la pena que tu aprecio por ti misma
dependa menos de la opinión de los demás, que sepas cuánto vales y encuentres
que tus sentimientos no son algo que el otro puede usar para ridiculizarte o
hacerte daño.
Si bien es cierto que es la manera en que solemos funcionar
a los 14, es también una oportunidad de acompañarnos con una opinión de alguien
que ya pasó por esto. Me parece que es lo que da el mayor mérito a tu consulta,
el abrirte a una posibilidad de acompañamiento que permita que te facilite las
cosas.
Lo que seguramente encontrarás es que te terminarás dando cuenta que a
los 14 los niños (aún) se comportan de manera de manera contradictoria: suelen
tener miedo de mostrarse débiles y muchas veces tratan de parecer superiores no
sólo con las chicas, también con sus compañeros. Ten presente que es la manera
en que muestran su propia inseguridad frente a este nuevo mundo que se les abre
y no saben cómo manejar. Lo más probable es que le gustes y por eso mismo se
asuste.
Pero, tranquila, tienes que aprender a darte tiempo y… a darle tiempo. Esa actitud permite que tanto tú como él vayan teniendo confianza en sus
afectos. Trata de no actuar intentando manipularlo o movilizar sentimientos
para comprobar lo que quieres. Deja que las cosas se acomoden de manera
natural… Trata de no ser impulsiva, eso te ayudará a madurar las emociones al
amparo de la experiencia de la realidad, le darás tiempo a que las cosas se
muestren como son y no necesariamente como te imaginas, menos aún en aquello
que parece un fantasma, que el otro pueda realmente despreciarte.
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