2018 07 25 El oficio de hacer amigos

Tengo algunos problemas de como relacionarme con personas, no se que decir cuando me hablan o cuando estan bromeando aveses digo algo en broma y piensan que lo digo como si fuese de verdad, solo quiero saber como aprender a hacer amigos.

Amigo, parece que lo que está faltando es poder comportarse con naturalidad con los demás… Eso es algo que se cultiva desde niño y suele ser la familia la que lo condiciona. En la medida en la que uno contó con un ambiente facilitador, poco exigente y con capacidad para tolerar errores, uno termina sintiendo que tiene confianza y no importa si comete errores… aprende a corregirlos. Quizás en su infancia algo falló y ahora toca corregirlo, ahora puede… si usted quiere.

Pues bien, su caso parece ser el de una persona tímida, que está demasiado atento a lo que van a pensar o decir de usted. Siendo así, no fluye con facilidad. Cuando uno dice una broma, si es que tiene fama de serio, a veces los demás no lo toman como tal. A mi me ha pasado muchas veces eso, casi siempre entre personas que me ubican como “el doctor”, asumiendo que soy serio (que lo soy cuando corresponde), pero, entre amigos, que saben que soy bromista, les encanta y entran al juego de entender que lo que digo es una broma, casi siempre en el juego de palabras… Eso sí, si no lo entienden, puedo pensar en que son lentos, pero no me siento mal por ello. Usted siente, por el contrario, que algo falla en usted o que no lo comprenden y se problematiza con eso, denotando algún déficit en su autoestima.

Aprender a hacer amigos, lo emparentaría con el encontrar espacios en donde se pueda jugar (como, por ejemplo, hacer algún deporte que le guste)  o interactuar lúdicamente. Se me ocurre que el espacio de expresión corporal que ofrecen grupos como Pataclaun (si es que está en Perú), sirven. Ensayar más a menudo el mirar a la gente, saludar con la mirada sonriente, hablar con gente que forma parte de nuestro cotidiano, como el portero, la secretaria, conocerlos por sus nombres, desarrollar familiaridad, sentir el influjo de la amabilidad propia y ajena… 

Bueno, todo eso y mucho más, pero sin tratar de hacerlo perfecto ni forzarse por ello, deje que vaya fluyendo como algo natural. Puede, también, asistir a grupos de terapia… En este último caso tendría la ventaja de que le señalen la observación de lo que transmite a los demás.