2018 05 18 Pensamiento Negativo

Hola. Tengo 27 años y quiero consultar porque hace unos años vengo pensando cosas negativas de mi, por ejemplo, pienso que no merezco nada bueno, que soy una inútil, que es mejor estar sola porque soy como un parásito para los demás y no les aporto nada bueno. No tengo empleo y me da miedo enfrentarme a un trabajo que yo siento que no voy a dar con el nivel, siento que no soy tan buena profesionalmente y de hecho tampoco me esfuerzo por mejorar o por aprender... No tengo ganas. Dependo económicamente de mi madre,peleo mucho con ella, se le olvidan las cosas y yo no tolero eso, y eso me hace sentir que le estoy haciendo daño, porque seguro ella podría ser feliz sin mi. Tengo una pareja a distancia, y a pesar de que me anima a seguir a delante, siento que se aburre de que yo siga igual día tras día. La intimidad con mi pareja me da miedo, soy muy timida en ese aspecto y en muchos aspectos de mi vida. Tengo pocos amigos y a veces no quiero verlos... Prefiero estar sola.... En si, me siento desmotivada por vivir, no hay algo que me apasione o me haga sentir plena...me da miedo enfrentar situaciones problemáticas, casi no me gusta salir de la casa. Y siento que todo sería mejor si yo me fuera lejos de todo y todos. No sé qué hacer para salir de mi zona de comfort y negatividad... Alguna vez asistí a un siquiatra y me mandó a tomar trazodona y escitalopram, pero no volví porque sentía que no pasaba nada. Y me da miedo volver... Agradezco una guía o palabras que me ayuden a mejorar. Gracias.

Estimada:

La vida va sumando los acontecimientos, logros y fracasos y las emociones que acompañan nuestro quehacer. 

Cuando una persona es muy sensible, le resuenan más las cosas, le afectan más y esa misma sensibilidad le hace difícil el “molestar” a otros con sus problemas. Esto se suele aprender desde muy niño, en particular si los padres andan muy estresados o ausentes. 

Entonces, uno ensaya hacerse el fuerte y aferrarse al ejercicio de tomar distancia de las cosas para que éstas no nos afecten. Con suerte, nos compensamos sacando buenas notas o “comportándonos bien”, echándonos a la espalda los miedos y temores y tirando para adelante. Pero, poco a poco se van desgastando las fuerzas y llega un momento en que es como que nos entregáramos al enemigo; dejamos de pelearla y nos resignamos para defendernos de un mundo que cada vez sentimos más opresivo y amenazante.  

Entonces, nos instalamos en una defensa pasiva.  Desviamos la pelea hacia el interior de nosotros y nos la pasamos reprochándonos y maltratándonos de cualquier manera.  Retraerse se convierte, así, en una defensa muy fuerte, parecida a cuando los seres biológicos unicelulares se enquistan a modo de protección.

Es evidente que has desarrollado una autoestima que va en déficit y nada estimulada por la ilusión… pero, veo que has intentado una relación amorosa. Eso dice que, en medio de todo, algo en tí sigue buscando una conexión con los demás, con la vida… con la ilusión, con el amor. Pero el miedo y la visión negativa de ti misma te tienen en jaque y no dejan que eso crezca. Es más, temes ilusionarte y prefieres optar por el pesimismo “todo va a salir mal”…”no  me lo merezco”…

Es importante que te des cuenta que tu crítica  más fuerte eres tú misma. Tienes que partir por suavizar tu mirada sobre ti misma. Hacerte cargo de ti misma tendrá que partir de eliminar frases duras contigo misma, por ejemplo, “soy como un parásito…”

No sé... parece que te tienes poca paciencia. Mírate como alguien que se siente débil y necesita comprensión. 

Quizás al principio tengas que fortalecerte con pequeños logros (como el no criticarte). Trata de encontrar el lado positivo de las cosas, como, por ejemplo, que tal vez toda esta adversidad que te ha tocado vivir te ha dejado alguna enseñanza y no lo has entendido así. Lee sobre personas que han pasado por lo mismo y lo han superado y que, incluso, se dedican a ayudar a otros…

Si fuera posible, concurre a una psicoterapia o, también, puede ser que tu nivel de angustia requiera que tomes algún medicamento recetado por un psiquiatra. Eso ayuda muchísimo.