Hola hace dos
semanas empese a tener creo que problemas de ansiedad sien muchos pensamientos
pertubadores de irealidad y despersonalizacion y estoy generando miedos como
miedo a morir miedo al suicidio ya q me estoy ya no me siento tranquilo en la
calle mi trabajo a sido afectado y le e perdido el gusto a muchas cosas q me
gustaban hacer antes quiero ser la misma persona tranquila de antes
Uno de los problemas más frecuentes de las personas que padecen de angustia y pánico es
que sienten que tienen que superarlo por propia gestión. Es como que le restaran
importancia por tratarse de una cuestión emocional… Y, no les falta razón, pero
hay un momento en que ya no lo podemos manejar por nuestra cuenta o solo a partir de nuestra buena voluntad. Es, entonces, cuando hay que aceptar que llegó el momento de pedir ayuda.
Su carta es un pedido de ayuda. Corresponde darse cuenta que lo está haciendo en momentos en que ya la sintomatología le está trayendo complicaciones para la vida misma, incluso tiene problemas en el ámbito laboral.
Si quiere mejorar y volver a la tranquilidad de antes, debe dejarse ayudar. Uno pierde el equilibrio usualmente porque ha estado acumulando cosas sin resolverlas emocionalmente.
Cuando emerge la angustia es bueno saber que nuestros sistemas de defensa colapsaron y ya no nos funciona el modelo que estábamos manejando. Se requiere hacer “mantenimiento”, revisar cómo estamos trabajando, estudiando, asumiendo responsabilidades, etc. Incluso, examinando problemas que no hemos resuelto desde el pasado y que asoman desde el inconsciente.
Pues bien, este “mantenimiento” consiste en revisar con el psiquiatra la mejor manera de controlar este enojoso síntoma; y, con un psicoterapeuta revisar las posibles causas que nos acechan desde dentro, desde nuestra manera de ser, de ver la vida, de dar espacio -y de qué manera hacerlo- a nuestras necesidades afectivas, etc.
Su carta es un pedido de ayuda. Corresponde darse cuenta que lo está haciendo en momentos en que ya la sintomatología le está trayendo complicaciones para la vida misma, incluso tiene problemas en el ámbito laboral.
Si quiere mejorar y volver a la tranquilidad de antes, debe dejarse ayudar. Uno pierde el equilibrio usualmente porque ha estado acumulando cosas sin resolverlas emocionalmente.
Cuando emerge la angustia es bueno saber que nuestros sistemas de defensa colapsaron y ya no nos funciona el modelo que estábamos manejando. Se requiere hacer “mantenimiento”, revisar cómo estamos trabajando, estudiando, asumiendo responsabilidades, etc. Incluso, examinando problemas que no hemos resuelto desde el pasado y que asoman desde el inconsciente.
Pues bien, este “mantenimiento” consiste en revisar con el psiquiatra la mejor manera de controlar este enojoso síntoma; y, con un psicoterapeuta revisar las posibles causas que nos acechan desde dentro, desde nuestra manera de ser, de ver la vida, de dar espacio -y de qué manera hacerlo- a nuestras necesidades afectivas, etc.
El trastorno
de angustia es como la fiebre, nos avisa que algo no anda bien. Pero, no se
trata solo de “bajar la fiebre” (calmar la angustia). Es mejor resolver la
causa, aquello que no está funcionando bien, de lo que, la angustia nos está
avisando.
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