2019 08 21 Mala redacción

Tengo 21 años y desde los 16 he pasado por altos y bajos, siempre pensé que tenía depresión debido al tipo de pensamientos que tenía y a que me autolesionaba e incluso intenté suicidarme más de una vez. A lo largo de los años han habido pausas pero siempre volvían aquellos sentimientos y llegué a pensar que quizás tenía depresión crónica o estacionaria. La cosa es que, el otro día estaba en Instagram viendo las publicaciones y salió una sobre trastornos mentales y como siempre la de depresión me identificó pero cuando ví la de trastorno de límite de la personalidad sentí que me describía completamente. En mi niñez y adolescencia tuve muchas dificultades y siento que eso me afectó al punto de alterar la persona que podría haber llegado a ser, incluso fui seis meses al psicólogo pero me rendí al no ver mejoras. Al ver lo que salía en la publicación lo entendí, jamás le dije ni le comenté a mí psicólogo que cuando algo me daba mucha rabia me hacía daño porque me daba vergüenza, que reaccionaba mal, que era muy impulsiva, que en el mismo día podía estar muy alegre y después explotar con algo simple o querer morir por un problema. Tan solo le contaba que desconfiaba de la gente, que pensaba que no le caía tan bien a mis amigos y que siempre me sentía sola, porque el resto de las cosas las consideraba irrelevantes. No obstante, ahora creo que callar todo eso fue la causa de que no hubiese una mejora, que siguiese pasando por malos momentos, que pase de odiar a mi familia, a mi pareja a amarlos y que albergue en mi una gran dosis de rabia. Quisiera saber si con todo lo que he dicho hay posibilidades de que tenga el trastorno o que sea otra cosa y de ser así que puedo hacer. Actualmente estoy pasando por un buen momento y por eso puedo escribir esto, pero bajo otras instancias no podría por la vergüenza y la culpa te todas esas cosas. Ya que, he llegado a situaciones en donde mi pareja me ha encontrado haciéndome daño y lo he amenazado con terminar con el si le dice algo a mi familia o matarme. No intento manipularlo pero lamentablemente termino siempre haciendo eso y a pesar de que las cosas sean mi culpa me termina el o otros pidiendo perdón. No se asumir la culpa, ni escuchar críticas, no se lidiar con el estrés ni con situaciones difíciles y realmente quisiera saber que puedo hacer. Quizás en otros momentos desee morir y me odie a mi misma, sin embargo, justo ahora no lo hago. Espero su ayuda y disculpe si está mal redactado esto, tan solo son muchas cosas que decir y no me había atrevido a decirlas todas juntas.

Empiezo por esa frase final porque justamente me estaba sintiendo agradado por tu redacción. Entonces, parece que caminas con un alto nivel de exigencia contigo misma, al punto de descalificar lo bueno de ti, lo que, sumado a todo lo demás que cuentas, termina siendo abrumador. 

Desde la redacción, puedo ver que tienes lo que llamaría “recursos sanos”, das cuenta de ti de manera adecuada. Si vemos que el factor vergüenza anda metido por allí y ha hecho de las suyas a la hora de hacer terapia, nos dice que tienes capacidad de represión, lo que, eventualmente, podría ayudar a regular tus emociones.

Si me pusiera en tus zapatos, me metería en cuerpo y alma en algún proceso terapéutico, y, si se necesita apoyo de fármacos, lo aceptaría; aceptaría en realidad cualquier cosa que contribuya a superar esta coyuntura que ensombrece mi futuro. 

Yo he tenido problemas a mis 20 años y me pasé mucho tiempo en terapias. Al final, terminé haciendo de mi problema un recurso para ayudar a los demás; pude entender mejor mi sensibilidad y, desde allí, entender mejor a quien necesita ayuda.

Y, ¡necesitas ayuda!, no te quedes pegada a los diagnósticos, nadie es igual al otro y uno puede condenarse poniéndose un rótulo,una etiqueta. Piensa que tú eres diferente, proponte enfrentar tu situación y hasta fortalecerte de ella. ¡Déjate ayudar!, ábrete con todo a quien otorgues confianza en lo terapéutico. Estoy seguro que si persistes vas a lograr mucho… A mí me fue bien. Te deseo lo mejor.